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PLAN DE INTEGRACIÓN AUSTRAL

ABRIL TURISMO S.R.L.

DL79

El Plan de Integración Austral fue una propuesta que les hice a los dueños de la E.V.yT. Abril Turismo en 1979, con el objeto de desarrollar viajes de estudios a Ushuaia, una zona altamente sensible luego del conflicto del Beagle a fines de 1978.

 

Su exitosa implementación nos dio la oportunidad de llevar alrededor de medio millar de estudiantes a Ushuaia en las temporadas bajas de los años 80’ y 81’. Pero más importante aún, a muy corta edad me permitió afianzar una entrañable relación con Tierra del Fuego y ganarme la consideración de autoridades, así como de los principales operadores turísticos de la Patagonia de ese momento. 

 

El Programa se discontinuó en 1982 a causa de la guerra de Malvinas cuando ya teníamos unas 600 reservas para ese año, momento en el que decidí radicarme en Ushuaia


El Plan:

La propuesta se basaba en un fundamento geopolítico, que constituía una verdadera “rareza” para el momento.

En el contexto de la profunda sensibilización generada por el conflicto con Chile del 78' por las tres islas, la idea era que, en vez de lucrar llevando estudiantes a Bariloche, Brasil u otros lugares consagrados y de moda, proponía generar rentabilidad llevándolos a Ushuaia, lugar del país de gran belleza y con una tremenda vulnerabilidad geopolítica que necesitaba imperiosamente generar concientización en las jóvenes generaciones.

Características de los viajes propuestos:

Se trataba de “viajes de estudios” tal como exigía el Ministerio de Educación de la Nación para autorizar los días de clase, que requería un trabajo previo de investigación, una agenda durante el viaje y un trabajo posterior.

 

Apoyo que brindábamos Abril Turismo a colegios:

1.- Antes del viaje facilitábamos un menú de tópicos y la información correspondiente para el elaborar el trabajo previo exigido.

2.- Durante el viaje facilitábamos contactos deportivos con estudiantes locales (tal como sugería la normativa del Ministerio de Educación) y tenían una clase explicativa sobre el conflicto del Beagle y la posición argentina sobre las tres islas en disputa, brindada por expertos del Área Naval Austral.

3.- Luego del viaje, ofrecíamos nuestro apoyo para completar el trabajo solicitado

 

Objeto del Plan:

Por tratarse de una empresa privada (no de beneficencia) el objeto de fondo era obviamente generar rentabilidad,

 

Pero, con lo que en el presente sería el concepto de "resposnabilidad social empresaria", el Plan tenía como objeto contribuir a un movimiento "integrador" del espacio territorial, generando vínculos de identificación y empatía de las jóvenes generaciones para con un lugar del país con profunda vulnerabilidad geopolítica.

Aquí es necesario detenerse y remarcar que a fines de los años 70’, era mayor la población extranjera que la nacional en Ushuaia. Y que la Patagonia austral, en especial Tierra del Fuego, era un espacio prácticamente ignorado y totalmente ajeno a la “centralidad” del país.

Implementación:

En base a una argumentación con sólidos fundamentos geopolíticos, elevamos el proyecto a:

  • Gobernación de Tierra del Fuego

  • Aerolíneas Argentinas

  • LADE

  • Armada Argentina

  • Ministerio de Educación de la Nación

 

Apoyos logrados:

Gracias a una matriz conceptual consistente y ciertamente atípica, por tratarse de una “Agencia de Viajes”, logramos importantísimos apoyos:

1.- La primera nota de apoyo llegó en noviembre 1979 firmada por Carlos Delorenzo, de la Dirección Territorial de Turismo. Luego siguieron de Guillermo Torre, de Ariel Boechat, de Rogelio Corazza, todas autoridades de Turismo Territorial. Antonio Torrejón también brindó un trascendente respaldo institucional.

2.- Luego de la Armada Argentina

3.- LADE también envió una nota comunicándonos su buena predisposición

4.- El Ministerio de Educación contestó que, si bien estaba de acuerdo con los fundamentos y el objeto, por norma no podía proveer apoyo formal a la iniciativa.

5.- Aerolíneas Argentinas nos brindó un trato preferencial y a través de ellos se estructuró el Programa, con tarifas especiales en vuelos nocturnos a Río Grande (AR no operaba entonces en el aeropuerto de Ushuaia)

Comentario:  Más allá de la satisfacción, el orgullo y el beneficio económico que me dio esta iniciativa (con las ganancias me compré mi primer auto) lo más valioso fue que me permitió afianzar una entrañable relación con Tierra del Fuego y, a muy corta edad, ganarme el respeto de autoridades y del los principales operadores turísticos de la Patagonia de ese momento. 

Fundamentos y Propuesta
Plan de Integración Austral

Primer Contingente

Colegio Santa María de San Isidro

7 al 15 de Septiembre de 1980

Antecedentes:

Mi experiencia en la Antártida como voluntario en el Servicio Militar influyó en forma determinante también con mi enfoque laboral.

Más allá de la fascinación y la increíble experiencia que resultó "vivir" un tiempo en la Antártida, lo absolutamente excepcional y que me impactó en forma determinante, fue descubrir lo que “el sexto continente” significa geopolítica y estratégicamente para el mundo, particularmente para las grandes potencias. Y a partir de ahí, el rol de nuestro país en tal contexto.

Terminado mi servicio militar le puse mucha dedicación a informarme y aprender todo lo que pude sobre el valor de situación a escala geoestratégica que hacen a la Antártida, por lo que inevitablemente surgieron el Atlántico sur y la Patagonia austral, como parte indivisible de un sistema en el que la Argentina presentaba una severa fragilidad geopolítica.

Lógicamente, el conflicto con Chile de diciembre del 78’ me causó un muy fuerte impacto, por lo que resultó muy motivador articular mis actividades laborales con mis convicciones más profundas.

 

Datos y anécdotas: 

Proceso de Captación

Comenzaba enviando el Plan junto a las notas de apoyo a una serie de colegios.

Luego, realizaba una visita a los colegios que se mostraban interesados 

Para tales visitas tuve el extraordinario y vital apoyo de una ídola total, que era la querida Ida Baldoma de Fígari, delegada de Turismo Territorial en Buenos Aires.

Ella hacía una impactante presentación apoyada en un moderno audiovisual con 100 diapositivas de Tierra del Fuego y yo comentaba los pormenores operativos y comerciales del Plan.

Una anécdota por demás divertida que no puedo dejar de mencionar!

Obviamente la seriedad y profundidad con la que yo escribía no tenía ninguna correlación con mi aspecto de roquero… (ninguna es ninguna...!)

Un día, en diciembre de 1979, me llaman de la Delegación para informarme que contábamos con total apoyo del Turismo Territorial y para citarme a una entrevista con la Delegada.

Voy a la semana siguiente con mis 25 años, con mi look habitual para días de mucho calor como suelen darse en diciembre: remera Hering cuello redondo, jeans, pero… zapatos! (no iba a ser tan descortés de ir con zapatillas..) y mis pelos de roquero.

Llego, me atiende una empleada que me invita a sentarme hasta ser atendido. Estaba sólo en la sala de espera.

Al rato se abre la puerta, aparece Ilda enérgica como siempre y con voz firme dice “Señor Leguizamón”.

Me mira a mi, mira el resto de la sala de espera vacía, mira para adentro de la oficina y les dice a los empleados “se fue el Señor Leguizamón…”

Yo levanto la mano para identificarme y veo que me observa de arriba abajo, incrédula y sin poder disimular su “sorpresa” por mi aspecto que evidentemente no encajaba con sus expectativas. Para quienes no vivieron esa época, 79'... plena época militar... la cuestiones oficiales se manejaban con una cierta "etiqueta", que obviamente no era mi fuerte.

Tiempo después me contó que por el contenido del Plan y las notas que les enviaba, esperaban a una persona mayor, seria y atildada y ni por casualidad a un pendex "pelilargo" y desalineado...

Pero la propuesta era muy buena e impecablemente fundamentada, por lo que muy pronto desaparecieron los prejuicios y con Ilda establecimos una relación de profundo y entrañable afecto!

Ella fue esencial en la etapa de captación de colegios, ya que su presencia “oficial” brindó una cobertura de formalidad que me hubiera sido difícil lograr sin su presencia.

 

Colegios

El primer colegio que viajó en septiembre de 1980 fue el Santa María de San Isidro.

En 1981 viajaron el Lenguas Vivas, el San Isidro Labrador, el Teresianas, el Sagrado Corazón de Jesús, el Centro Cultural Italiano y otros más

 

Para 1982 ya tenía más de diez colegios interesados en viajar, pero la guerra de Malvinas interrumpió la serie. Ahí tomé la decisión de radicarme en Ushuaia.

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